Oliver Blume, director ejecutivo del Grupo Volkswagen, ha reconocido la importancia de España y Portugal en su estrategia de eficiencia y adaptación. La empresa alemana anunció una serie de medidas en su producción que supondrán un recorte del volumen de vehículos eléctricos por la débil y lenta demanda. Además, el Grupo Volkswagen ha reforzado la fabricación de modelos con motor de combustión interna, con el objetivo de adaptar la producción a la evolución del mercado.
El también CEO de Porsche ha acreditado la asignación de los nuevos modelos eléctricos a las plantas del grupo alemán en España y Portugal porque son las únicas que “pueden competir en costes con Europa del Este e incluso con muchas plantas chinas”, explicó Blume en una entrevista con la Agencia Alemana de Prensa.
The Volkswagen Golf at the factory / Volkswagen
El Grupo Volkswagen sigue reorientando su política de producción en un contexto de creciente competencia internacional. Su director ejecutivo habló sobre las medidas de ahorro y reordenación de la empresa alemana, que incluyen la rescisión de más de 35.000 empleos en el Grupo Volkswagen (7.500 en Audi, aproximadamente 4.000 en Porsche y recortes en otras filiales).
Los nuevos modelos del Grupo Volkswagen se fabricarán en España y Portugal
Blume ha destacado la importancia de la Península Ibérica para la empresa alemana. Los nuevos Volkswagen ID Cross, ID Polo, el Cupra Raval y el Skoda Epiq se fabricarán en España y Portugal. La planta de Martorell (Barcelona) ensamblará el Cupra Raval y el ID. Polo, mientras que la planta de Pamplona fabricará el ID Cross y el Skoda Epiq.

The ID.4 model of the German firm in the factory / Volkswagen
El Grupo Volkswagen baja en eléctricos y sube en gasolina
La empresa alemana anunció hace unas semanas una serie de medidas en su producción en Alemania que supondrán un recorte del volumen de vehículos eléctricos, y el refuerzo de la fabricación de modelos con motor de combustión interna, con el objetivo de adaptar la producción a la evolución del mercado.
El Grupo Volkswagen anunció que las plantas de Zwickau y Dresde, dedicadas exclusivamente a la producción de vehículos eléctricos, detuvieron su actividad durante una semana a partir del 6 de octubre. A pesar de estos cierres y recortes en varias fábricas del Grupo Volkswagen por la baja demanda, la sede central del grupo (en Wolfsburgo), introducirá turnos especiales los fines de semana hasta Navidad para contestar a la alta demanda de modelos como el Golf, Tiguan y Tayron, con motor de combustión.
Esta decisión refleja las dificultades del mercado europeo para consolidar la electrificación, a pesar de que la Unión Europea ha puesto de plazo el año 2035 para prohibir la venta de coches de combustión. Además, el Grupo Volkswagen es el mayor vendedor de coches eléctricos en Europa, y a pesar de este éxito, se ven obligados a paralizar varias fábricas y reorganizar la producción por la baja demanda de vehículos eléctricos.
