Los criterios medioambientales se van consolidando en la contratación de la Generalitat de Catalunya. Según ha hecho público la conselleria de Economia, durante 2024 más de la mitad de las adjudicaciones -un 52,9%- de un total de 16.295 incorporaron cláusulas de esta índole, la cifra más alta registrada hasta este momento y un punto por encima del ejercicio de 2023.
Se supera así de nuevo -y ya es el segundo año consecutivo-, el objetivo fijado en el plan de acción de compra pública verde de Catalunya 2022-2025 de superar la mitad del volumen económico de los contratos con cláusulas ambientales. En cifras absolutas del importe que representan, eso supone que el 58,1% -3.884 millones- se adjudican vía contratos con estos requisitos.
Las cláusulas ambientales en la contratación pública son disposiciones que se incluyen en los pliegos de condiciones de las licitaciones para promover la sostenibilidad y la protección del medio ambiente y, entre ellas, se pueden encontrar desde el uso de materiales sostenibles en la fabricación de los uniformes del personal de las empresas que ofrecen servicios de seguridad, al uso de productos con etiquetas ecológicas para los contratos de limpieza. Los contratos de obras son los que acumulan el porcentaje más alto en cláusulas medioambientales, ya que un 63,8% de los adjudicados incluyen estos requisitos.
“La sostenibilidad tiene que ir estrechamente ligada a la competitividad, porque es un vector clave en el crecimiento económico de cualquier país que quiera prosperar”, ha defendido la consellera de Economia, Alícia Romero, en el comunicado hecho público por su departamento, en el que también valora “los buenos resultados” que supone este balance. Que Catalunya quiere “liderar la transición ecológica” es un alegato que forma parte del discurso del Govern de Salvador Illa.
Subscribe to continue reading
