La política va de gestos. Y esta semana ha habido varios y otros se han echado en falta
Empezando por el presidente del Gobierno que ha reconocido en primera persona los “incumplimientos” para con Junts que negaba una semana atrás. Una muesca más en su debilita credibilidad.
Los de Carles Puigdemont consiguen que Pedro Sánchez se mueva y un reconocimiento a su capacidad de presión, ser el centro de la atención política. Veremos qué nos deparan los siguientes capítulos de esta separación que, por ahora, salva el divorcio, y que tendrá ante sí unas semanas sin actividad para pensar cómo seguir.
Gestos como el silencio con el que pasó la reunión de alto nivel de España-Marruecos. Raro en un presidente que da tanta importancia a la agenda internacional y que podría servirle para poner el foco en otros asuntos. Pedro Sánchez sigue sin salir de la gravedad del momento que supone que el que fue su círculo más cercano está pasando por prisión.
Y en silencio también está el PSOE, sus mandos, ante las denuncias de casos de acoso sexual que sacuden la estructura, que avivan cuitas internas y que, además, golpean la línea ideológica del partido.
Question of State And after this noise now what.00 00 05 14.Still image001
Veremos el coste. A las puertas de un ciclo electoral que se inicia en Extremadura y que pasará por Castilla y León, Andalucía y quién sabe si habrá una primavera electoral con más urnas.
Postdata: Estamos en el último mes de un año en el que han sido asesinadas 42 mujeres y otros tantos menores, varias estos días.
Subscribe to continue reading
