El Real Oviedo sigue aglutinando reconocimientos en los últimos días, consecuencia de su inminente centenario y reforzando su importancia en la sociedad asturiana tras el último ascenso. Jesús Martínez, presidente del Grupo Pachuca, ha recogido en la Cámara de Comercio de Oviedo la Medalla de Oro, “por su destacada trayectoria y compromiso con Asturias”. El dirigente ha agradecido la distinción, subrayando que “compartimos con los seguidores y todos los que han hecho que en cien años el club haya recogido tantos valores”.
El acto, conducido por la periodista Loreto Matilla, colmó en elogios al club carbayón. Fernando Villabella, secretario general de la Cámara y presidente del Alimerka Oviedo Baloncesto, destacó “el vínculo emocional que crea el Real Oviedo y que conecta más allá de ideologías y generaciones”.
José Armando Tellado, director general de Central Lechera Asturiana, fue el siguiente en intervenir. “Ser del Oviedo es una fe laica, de creer en lo que parece imposible y de mirar hacia adelante más allá de las dificultades que encontremos en el camino. Su contribución social es muy importante: de unión en momentos de polarización”, indicó.
“No han venido solo a gestionar un club sino a crear un proyecto con alma y convertir al Oviedo en referencia mundial”, añadió.
A continuación, intervino Jesús Martínez:
“Recibir esta medalla resume la esencia de un club de fútbol. No somos solo instituciones deportivas, sino humanas, culturales y económicas. El deporte es un movimiento capaz de cambiar las cosas. La historia del Real Oviedo es un ejemplo de resistencia, de altas cumbres, caídas, renacimientos, lealtades, y orgullo, valor y garra. Pocos equipos en el mundo se parecen tanto a sus ciudades como el Real Oviedo”, expuso.
“Vinimos a formar parte de una gran familia. El ascenso es un acontecimiento económico también, ampliará la actividad en algunos sectores y generará más fuentes de empleo, además de colocar el nombre de Asturias y Oviedo en las plataformas digitales del mundo”, añadió el dirigente mexicano.
Las palabras de Paniceres
El broche del acto, en el que también asistieron el Alcalde de Oviedo Alfredo Canteli, el consejero de Medio Rural Marcelino Marcos y el arzobispo Jesús Sanz Montes, entre otros, lo puso el presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Paniceres, que definió al club azul como “un proyecto con raíces y con futuro, que sabe de crisis y de renacimientos, y que demuestra que cuando una comunidad se une en torno a un propósito común, no hay obstáculo ni dificultad que no pueda superarse”.
Paniceres se felicitó por las “buenas noticias para Asturias” de los últimos días, con la llegada de universidades privadas, con la Alfonso X a la cabeza, los contratos adjudicados recientemente a Indra y a Tess Defence o la fabricación de vehículos blindados en Gijón y Trubia.
Además, Paniceres aprovechó su discurso para denunciar “el peaje del Huerna, que castiga a nuestra región desde hace décadas. Bruselas ha reconocido que la prórroga de la concesión es nula de pleno derecho, y pese a ello el Gobierno central insiste en mirar hacia otro lado”.
Para la Cámara, el Real Oviedo representa una mezcla de orgullo, resistencia y fe en el porvenir, y recibe el galardón porque “ha sido, y es, un motor de cohesión territorial y emocional, un embajador de Oviedo en el mundo, y un ejemplo de cómo la adversidad puede convertirse en estímulo colectivo”.
Via: The New Spain
